• Confesiones
  • Yo confieso

    Confieso que me encanta el celador del edificio donde trabajo, es imposible no mirarlo. Le pongo como unos 28 años; tiene una cara de esas que miran con inocencia y a la vez con cierta malicia; es un poco más alto que yo y se nota que cuida su cuerpo. Se ha acostumbrado a saludarme […]