Y bueno esta es la historia, tiene un poco de todo y un poco de nada, así no más. Todo comienza con el que yo me haya inscrito a una de esas páginas que ofrecen parejas y amor, la verdad después de mi última relación no quiero saber de eso que llaman “amor”, la gran ventaja es que entiendo que el amor no siempre va ligado al sexo lo que me hace un «radical libre» en el mundo. Empecé a hablar con varias personas, sobre todo con las que saben escribir y tienen buena ortografía, y bueno, cuyas fotos fueran decentes… no en manga siittttssa o similares y encontré de todo.
El tema no lo miraba a diario, un día me llegó un mensaje diciendo que tenía muchas cosas por revisar, entré y vi uno que me causó mucha curiosidad. Estaba bien escrito y en un desorden sistemático interesante, solo había un pero: “Éste usuario ya no existe/cerró su cuenta”. ¡Plop! y ¿ahora?, pues nada, ¿para qué es Google? ¡Pues sí!, pa΄ buscar y bueno el que busca encuentra y lo encontré, pero estaba en un reto ahí todo X y bueno pasaron varios días antes de que me respondiera. Lo hizo y nos vimos un día de rapidez, yo iba para el SOFA y viajaba a la tierra donde trabajaba, empezamos a hablar, mucho… en exceso diría yo.
De día, noche, madrugadas, para eso sirve whatsapp, ¡es mágico! Eso palabras iban, venían sonrisas estúpidas y días risueños, todo una maravilla, nos vimos y bueno seguía manteniéndose la cosa, pero yo estaba segura de que no quería enamorarme… por cobarde o por necesidad, como quieran, pero el miedo era infinito. Empezamos a salir cada que yo regresaba de la tierra donde trabajaba y empezaron a pasar más cosas… sí, esas cosas. La primera vez fue muy rápido todo y la excusa fue: «estoy muy excitado» y yo pensé “bueno eso puede pasar no tiene que ser todo el tiempo”… pero al mismo tiempo decía yo: “¿Pero este man qué? ¿Lleva años sin nada de nada o qué?” Bueno la cosa siguió; palabras aquí, otro intento y mejoró el sujeto, no que uno diga “¡wow!” pero en comparación al primer intento digamos que como un buen pokemón, ¡evolucionó!
Así se dieron las cosas, este hombre le empezó a meter el corazón y yo en mis ataques de pánico furtivos le decía que no; luego como que sí le metí corazón. Para diciembre arrancamos de viaje a la costa, yo no conocía el mar y el decidió irse conmigo. Allá decidí arriesgarme, pero hubo momentos de intentarlo y fueron fallidos siempre llegaba alguien, hasta que al último momento lo logramos; bueno lo logró él y yo, que volaba ya de la piedra, así fosforito encendido, le dije: “ven pero ¿qué pasa? de por diojjj”. Su respuesta fue el detonante para mandarlo a la… sí allá. Con un sutil gesto dijo: “yo no puedo más, si quieres más pues te toca esperarte un buen rato, de lo contrario nada”. Yo estaba caliente, en todos los sentidos, pero eso hizo que mi cabeza hirviera a punto de estallar ¿ustedes que hubieran hecho? ¿Esperan el buen rato? ¿Estando a punto y que salgan con eso, huyen, lo golpean? Volví y le dije: “Un poco más” y su respuesta nuevamente fue: “Te TOCA esperarte…” No sea tan h… así ole… me levanté de un golpe y dije: “No joda, ¿todo esto para nada? Me voy a duchar”. Al final el man resultó uno de mis peores polvos y yo, dizque metiéndole corazón. Hubo un poco de drama, no hay que negarlo, pero con esa respuesta acabó con cualquier intento de fuga de mi zona miedosa frente al amor, y perdida en el horizonte de un polvo ΄e gallo… sin gallo. Fin.
Artwork by Cristina Vela
Pokemon Poster by Michael Myers
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— Equipo Soy Anónimo
Es un tema. Me parece que hubo un poco de egoísmo de parte del tipo, debió ser algo recursivo y tratar de compensar su «falta de tiempo». El buen sexo, hoy por hoy es una lotería, la gente en su alter ego se cree de 10 y no acepta critica constructiva ni toma en cuenta al otro. Hay que seguir probándose zapatitos dijo una amiga, un día calzamos el justo!