Soy un tipo raro

Pues yo me resisto a la tecnología, bueno al menos lo intento. Soy un tipo raro de aquellos que piensa que si se quiere hablar con alguien se marca el número y ya. Se habla con el otro o la otra, de viva voz. Es que a mí me aterra no poder deducir lo que está pasando del otro lado. Yo necesito escuchar la cadencia de la voz, el ritmo, la interrupción y todo aquello que no son palabras. Por eso “hablar” con ella me resulta tan difícil. Me envía un montón de mensajes llenos de emoticones de los cuales no entiendo ni la mitad o por qué decidió usarlos. ¿Son acaso subtextos cargados de otro significado? Ironía o risas genuina, ¿cómo saberlo?

Por eso contesto con monosílabos, como un autómata con miedo de contestar de la manera incorrecta. Claro, no soy tan idiota como para no entender lo básico, pero justo cuando creo que ya le cogí el tiro al tema ella me sale con que entendí algo mal y todo se va al traste. La mayor parte del tiempo sé que mi cuasitecnofobia le parece graciosa: “Julián enviando mensajes es chistosísimo”– les cuenta a sus amigos delante de mí. Y yo me río, porque ¿qué más hago? Ni siquiera cuando lo cuenta entiendo dónde entendí mal el mensaje. Pero otras veces se desespera. Y me mira con cara de “yo porqué carajos ando con este tipo”, y claro me siento mal, muy mal. Como si hubiera despertado en el lugar y la época equivocada. Me siento como un imbécil. ¿Por qué me queda grande algo que todos hacen? Y sobre todo, algo que ella hace.

Tattoo art by Nikita PetrovEsa mujer no tiene ni idea de lo que significa para mí. No se lo he dicho, pero por ella bajaría al infierno y volvería. Aunque me queda la duda de que si eso pasara, ella estaría esperando a que le enviara un mensaje de texto antes o algo así; se muere de la piedra si no le aviso antes de salir, porque es justo cuando le escribo que se empieza arreglar. Así que trato de acomodarme lo mejor que puedo. Cada vez que quiero escuchar su voz, le escribo cualquier cosa seguida de una carita feliz o una de esas que tienen un beso rojo pegado y me parecen horribles; espero un rato y le pregunto si la puedo llamar. La mayoría de veces dice que está ocupada; pero eso sí, sigue escribiéndome por dos horas seguidas con intervalos de 7 a 10 segundos. Entonces no entiendo qué tan ocupada puede estar, es decir hasta para estar con otro ¿debe prestarle atención o no?

Y para sumarle más drama a mi ineptitud tecnológica, ahora quiere que le responda con mensajes de voz grabados y así ella graba otro mensaje y me lo envía devuelta… ok. ¿Y más bien por qué no me llama? Digo, si nos vamos a demorar grabando y enviando mensajes que van y vienen. Mejor me llama y ya, ¿no?

Creo que no. Ese es el meollo del asunto. Llamar al otro/a parece haberse convertido en un acto muy íntimo, demasiado cercano. Como ir a la casa de alguien sin avisar, como entrar con las llaves que te dejaron sólo para emergencias, como robar un beso delante de todo el mundo. A eso ella le tiene miedo y yo lo entiendo. Se llama sólo cuando toca, cuando hay paseo y hay que coordinar, o cuando se necesitan direcciones precisas para llegar a algún lado o cuando alguien no aparece. Porque de lo contrario, quiere decir que ya somos algo más, que la barrera de la ambigüedad escrita se ha roto y eso la asusta. La asusta mucho.

Y después dicen que el tipo raro soy yo.

 

Imagenes:

Artwork by Deion Choi

Tattoo art by Nikita Petrov


 

Como siempre, gracias por sus colaboraciones. Por favor sigan enviando sus historias. Recuerden que también nos encuentran en Facebook (BlogSoyAnonimo) y en Twitter (@BlogSoyAnonimo).

Para publicar una historia anónima en nuestro blog, pueden dejarla anónimamente en nuestro formulario, o escribir un correo a [email protected]. No olviden nuestras normas de convivencia.

— Equipo Soy Anónimo

5 Comment

  1. Jairo says: Responder

    Totalmente de acuerdo…es más fácil decir las cosas en una llamada que estar chateando constantemente…Me pasa igual,,
    Muy buena la historia…Gracias por compartir…

    1. anonimo_admin says: Responder

      Muchas gracias a ti por comentar, Jairo.

  2. Muero de amor con hombres raros así!

  3. Excelente, es una tragedia lo que le ocurre, pero me sentí tan identificado a veces, que parecía estar ante un stand-up comedy, estilo Ricardo Quevedo. Me recuerda la respuesta de una amiga, mucho menor que yo, que le parecía tierno que le hubiera escrito un correo electrónico para saber como estaba, tal como se hacía el siglo pasado… jajaja

  4. Anonimo:) says: Responder

    Totalmente de acuerdo, muchas veces confundimos lo que se escribe con lo que realmente se quiere decir. Mas simple y entendible es una llamada, lástima que la palabra simple no entra en el vocabulario de algunas personas.

Deja una respuesta