No quiero contar la triste historia de una chica alegre, ni cómo se pasa de ser un ángel caído del cielo a que el cielo se te caiga encima, así que voy a tratar de escribir lo que sucede cuando lo único que tienes es papel y lápiz.
esperanza
No quiero, pero lo hago

En un mundo tan caótico y contradictorio como en el que vivimos hay días en los cuales no quiero salir de la cama. No quiero, pero lo hago. Lo hago porque, muy a pesar del caos y lo absurdo de algunas situaciones, a veces brilla el sol, la tierra está húmeda y expele olores a vida, a esperanza y a renacimiento.