Vaya uno a saber si a final de cuentas importa hacer las cosas bien o no. Total, en un mundo tan dignificado como este, donde todo el mundo cree lo que lee sin pensárselo dos veces, la rectificación o las disculpas dan lo mismo si no son igual de interesantes que el escándalo original. Así que hoy en día creo que no importa mucho si sigo insistiendo en que yo jamás me metería con una estudiante …